Tres formas principalmente conocemos de estar colgado, la
primera es relativa al síndrome de abstinencia que siente un adicto a algo, lo
que popularmente conocemos como "el mono", que como bien sabemos se
suele enganchar a los árboles y probablemente esta expresión tenga su génesis
en esta similitud.
Por otro lado tenemos las personas que actúan como dementes
o que directamente están chifladas y muy probablemente tenga su origen en la
anterior definición de estar colgado ya que los adictos cometen locuras para
calmar su obsesiva adicción.
Y por último, la tercera y más triste de las definiciones de
estar colgado, que más que "estar" es "ser dejado", hablo
de que te dejen colgado. Dejar colgado a alguien, es que dejarlo esperando algo
o a alguien que esperaba, es burlar a una persona en sus esperanzas y deseos,
es dejar a una persona sola y normalmente triste esperando a que lo que deseaba,
sucediera. Esta acepción muy probablemente viene de la acción que tenemos de
dejar colgados en el perchero nuestros abrigos cuando llegamos a algún sitio y
dejarlos ahí olvidados y desamparados hasta que los volvemos a necesitar.
Es triste esto de dejar colgado algo o a alguien, pero en
ocasiones es inevitable, bien por obligaciones de más importancia, desastrosos improvisos
o por el deseo irrefrenable que ha sido largamente postergado, el cual se
presenta sin avisar y con muchas prisas egoístas.
Si eres la persona "colgadora", pide perdón que
nunca está de más unas sinceras disculpas acompañadas de unas necesarias
explicaciones. Si eres la persona "colgada"... asúmelo y no pilles una rabieta innecesaria, no eres tan
importante para el que te ha dejado colgado sin avisar, aunque eso no quiere
decir que no le seas muy importante y que ahora debería estar en deuda contigo.
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